Esto va dedicado a mi amiga del alma, Pilar. El otro día me dejó un comentario en el hablaba de los amores que hemos tenido en la vida. Decía que hay amores con mayúsculas y con minúsculas y me gustaría hablar sobre esto y dejar aquí mi modesta opinión.
Todos los amores cuando empiezan se escriben con mayúsculas, porque creemos en ese momento que jamás hemos sentido algo así en la vida y ponemos todas las ilusiones y las esperanzas en ellos. Nos parece que nadie puede tener algo así y que nunca, nunca va a haber nada igual. Pero no es verdad. Por desgracia los amores al final se acaban convirtiendo en algo que tiene mucha letra pequeña, y esa siempre está escrita en minúscula, tanto que no lo vimos cuando creíamos que nos enamorábamos.
Decía Sabina que los amores que matan nunca mueren. Pues tampoco es verdad, los amores que matan solo matan y se mueren porque no te queda otra que matarlos. Pero en realidad deberíamos saber a qué le llamamos amor. Puedes pasar como yo, treinta años con una persona y al final darte cuenta de que nunca la has amado y que lo que sentías era una especie de síndrome de Estocolmo, una dependencia mezclada con culpabilidad, que es algo que saben administrar muy bien los manipuladores. ¿Es eso amor? No.
Por desgracia, para mi al menos es que de todo esto te des cuenta cuando ya eres muy mayor. De repente sabes que no has conocido el amor nunca, que has aceptado migajas y malos tratos a cambio de yo qué sé qué. A cambio de nada en absoluto. en todo caso a cambio de dolor y soledad en compañía que es la peor de todas las soledades que existen
Pilar, dices que ahora a nuestra edad los amores son más tranquilos, mas respetuosos y más amables, estoy de acuerdo en parte, pero solo en parte. El amor en realidad debe de ser así, tranquilo, respetuoso y amable. ¿Por eso son amores con minúsculas? Ni hablar, eso es el AMOR con las mayúsculas más grandes del universo, el único AMOR que de verdad merece la pena ser vivido.
Tú y yo, Pilar hemos tenido la suerte de enamorarnos a una edad tardía, demasiado diría yo. Y tú no sé, pero yo me he dado cuenta de que los otros amores están escritos en mi vida con minúsculas enanas, tanto que ya se me escapan de la vista y me parece que nunca existieron. El AMOR que tengo ahora está escrito en grande, porque es lo más grande que he tenido. Y además de ser tranquilo, respetuoso y amable, tiene muchísimos fuegos artificiales.
Te deseo lo mismo a ti. Con muchas mayúsculas. te quiero amiga
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