jueves, 4 de noviembre de 2010

En espera

¿A qué espero? Espero a que todo cambie, espero que me salgan alas, imaginarias claro, y empezar a volar. Volar de aquí.
Espero que la vida no se me haga cuesta arriba, que los días no sean eternos, que se me alivie un poco la pena. Espero que haya un milagro, que suene el teléfono, que alguien me mande un correo. Espero no tener que volver a llorar, que nadie muera por un cuchillo, que las mujeres se defiendan, que los hombres dejen de matar, que el mundo se vuelva cuerdo. Espero un día de lluvia tranquila sin viento, que mis hijas sean felices. Espero no morir en el intento de vivir un poco, espero no querer morirme cada día, espero poder escribir lo que siento. Espero ser dura para superar este tiempo tan duro.
Espero porque no puedo hacer otra cosa más que esperar. Lo que está en mi mano ya lo he hecho.
Espero. Espero no cansarme de esperar.

martes, 2 de noviembre de 2010

Hoy

Hoy he decido que ya está bien. Que ya es suficiente. No se puede vivir en una cárcel y quiero ser libre.
Hoy empieza una nueva vida más solitaria pero más llena, de alegría y de tranquilidad.
Amigos, he vuelto con el alma descosida pero no rota, y aprenderé a coser si hace falta y procuraré que el zurzido parezca un bordado.
He estado muerta, pero voy resucitando, me falta mucho aun, pero hay que empezar por el principio, tomar decisiones, fingir felicidad y amarrar fuerte las cosas buenas para que no se escapen. Y sobre todo me tengo a mí, que no me tenía.
Aquí me teneis vosotros, todos,y a los que de algún modo me quereis, espero que os alegre la noticia.